Por Isabella Canales
Se analiza, por parte del Grupo De Trabajo, sobre la utilización de mercenarios en este informe, dado que existe un impacto creciente de los mercenarios y las empresas militares y de seguridad privada en el tráfico y la proliferación de armas. Destacan la necesidad de establecer mecanismos internacionales más fuertes para su regulación, y la repercusiones humanitarias y de derechos humanos derivadas de sus actividades.
El informe está basado en las investigaciones documentales y las consultas con expertos y las partes interesadas, donde se examinan como los mercenarios y las empresas militares y de seguridad privada, además de proporcionar servicios militares y seguridad, contribuye a la demanda de armas en la regiones donde operan, de manera que facilitan el tráfico de armas en el mercado negro y gris, abordando, también, estrategias para fortalecer las normas internacionales por las que se derivan sus actividades.
Recientemente, el Grupo De Trabajo celebró sus periodos de sesiones 49°, 50° y 51°, manteniendo reuniones con estados miembros, ONG y organismos de la ONU. Se enviaron comunicaciones a cinco gobiernos y 55 entidades privadas sobre denuncias de violaciones de derechos humanos y, además, se realizaron consultas virtuales con expertos, y se participo en foros internacionales sobre la regulación de EMSP. Se realizó, en el año 2024, una visita a Costa de Marfil para evaluar la situación sobre el terreno.
Distinguimos en el informe entre transferencias de armas, lícitas y ilícitas, destacando como los mercenarios y las EMSP participan tanto en la proliferación como en el tráfico de armas, identificando tendencias alarmantes como puede ser la violación de embargos, la circulación de armas pequeñas y el uso de tecnología aditiva para la fabricación de armas. También se menciona la falta de transparencia, en el comercio de armas ligeras, lo que dificulta su rastreo.
A día de hoy, el marco por el que se regula es insuficiente y su cumplimiento varía entre los estados, ya que instrumentos como la Convención Contra El Reclutamiento De Mercenarios y El Documento De Montreux no abordan integralmente el tráfico de armas por parte de las EMSP.
El informe identifica cuatro vías principales de tráfico de armas: suministro estatal, incautación de arsenales, intermediación ilícita y desvío desde conflictos previos, advirtiendo sobre el patrocinio estatal las EMSP, la falta de control en la certificación de usuario final y la gestión deficiente de arsenales. Se recomienda, por parte del Grupo, fortalecer la regulación con mayor transparencia, sanciones efectivas y supervisión de las EMSP y mercenarios.
Isabella Canales