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Mercurio, extracción de oro en pequeña escala y derechos humanos

Por Josladys Vanessa Álvarez Negrón

 

De conformidad con la resolución 45/17 del Consejo de Derechos Humanos, el Relator Especial sobre las implicaciones para los derechos humanos de la gestión y eliminación ambientalmente racionales de las sustancias y los desechos peligrosos, Marcos Orellana, presenta al Consejo su informe dedicado a los daños y los riesgos que supone para los derechos humanos el uso del mercurio en la extracción de oro en pequeña escala. El mercurio es un metal pesado persistente, peligroso para la salud humana y el medio ambiente, cuyo uso en actividades mineras provoca una gran contaminación mundial y afecta a la salud humana.

Si bien el Convenio de Minamata combate la contaminación antropogénica por mercurio mediante la regulación de su comercio, la eliminación gradual de los productos y procesos relacionados con él y la reducción de sus emisiones industriales, sin embargo, sigue permitiendo el comercio y el uso del mercurio en la extracción de oro en pequeña escala.

Las dos formas principales de extracción de oro en pequeña escala son la extracción en aluvión, en la que el oro libre se recupera de las fuentes hídricas mediante bateo o el dragado de ríos y arroyos, y la extracción en roca, en la que se extraen y trituran rocas subterráneas para recuperar el oro contenido en ellas. El mercurio se utiliza corrientemente en ambas extracciones.

La mayor parte del oro extraído en pequeña escala, incluso tras ser sometido a cierta purificación en los comercios de oro, se considera doré, es decir que requiere un refinamiento posterior para cumplir las normas internacionales. Tanto el oro de origen legal como el de origen ilegal pueden entrar en esta cadena de suministro.

La Unión Europea y los Estados Unidos de América han prohibido totalmente la exportación de mercurio. Otros países han prohibido el uso de mercurio en la extracción de oro en pequeña escala, pero siguen permitiendo su importación para productos de iluminación, amalgamas dentales, usos de laboratorio y otros. Incluso en los países en los que el uso de mercurio está prohibido en la extracción de oro en pequeña escala, como el Camerún, Colombia, Kenia y Mongolia, este puede obtenerse con relativa facilidad procedente del contrabando

Tras la prohibición, los mayores exportadores pasaron a ser China, Indonesia y México, aunque algunas zonas de tránsito de libre comercio, como los Emiratos Árabes Unidos, la India, Panamá́, Singapur y Hong Kong (China), también pasaron a ocupar un lugar destacado

La elevada demanda de mercurio para la extracción de oro en pequeña escala procede principalmente de tres regiones: América del Sur (39 %), Asia Oriental y Sudoriental (37 %) y África Subsahariana (21 %).

En la mayor parte de los lugares del mundo donde se utiliza mercurio en la extracción de oro en pequeña escala, los derechos humanos de los mineros, los pueblos indígenas y propietarios tradicionales de la tierra se ven cada vez más amenazados por la contaminación por mercurio. En muchos casos, estas comunidades se ven empujadas a realizar dicha actividad por su pobreza y desconocen los efectos nocivos del mercurio. Entre 14 y 19 millones de personas se dedican a esta actividad en 70 países, y se estima que entre el 25 % y el 33 % de los mineros padecen intoxicación crónica por inhalación del vapor de mercurio metálico. Las mujeres y las niñas con edades comprendidas entre 14 y 45 años son especialmente vulnerables a los efectos neurotóxicos del mercurio, y un riesgo particular es el de las consecuencias para el feto. La exposición al mercurio en el útero, incluso a niveles muy bajos, puede afectar significativamente al coeficiente intelectual y provocar trastornos del desarrollo. Si la madre presenta niveles muy elevados de mercurio, el niño puede nacer con deformidades, trastornos cognitivos graves, o incluso llevarlo a la muerte.

Los problemas sociales y las violaciones de los derechos humanos son generalizados e imperan la trata de personas, la esclavitud, las enfermedades, la delincuencia y la violencia. Por otro lado, la deforestación relacionada con dicha actividad ha diezmado bosques y agravado la pérdida de biodiversidad, lo que ha intensificado la amenaza que se cierne sobre especies que ya estaban en peligro de extinción.

El 10 de octubre de 2013 se aprobó́ en una conferencia diplomática celebrada en Kumamoto (Japón) el Convenio de Minamata, que entró en vigor el 16 de agosto de 2017. El objetivo del Convenio es proteger la salud humana y el medio ambiente de las emisiones y liberaciones antropógenos de mercurio y compuestos de mercurio. El Convenio incluye disposiciones para que no se creen nuevas minas de extracción primaria de mercurio, se eliminen gradualmente las existentes y se reduzcan y eliminen progresivamente los productos y procesos industriales con mercurio, así́ como medidas para reducir las emisiones y liberaciones de mercurio procedentes de fuentes industriales. Todo ello ha constituido avances positivos que han logrado que el comercio legal de mercurio a nivel mundial se redujera de 3.500 toneladas en 2013 a 891 en 2020.

El Convenio también regula la práctica informal de la extracción de oro y la extracción de oro en pequeña escala. Sin embargo, en este ámbito presenta varias deficiencias que limitan su eficacia para reducir y eliminar el uso de mercurio en la extracción de oro en pequeña escala, ya que según lo dispuesto en el artículo 2 k), la extracción de oro en pequeña escala es un “uso permitido” del mercurio.

En resumen, no hay nada que justifique que el comercio internacional de mercurio se prolongue de forma indefinida. Es evidente que, en la actualidad, la mayor parte del comercio tanto lícito como ilícito de mercurio se destina a la extracción de oro en pequeña escala y, por lo tanto, perpetúa y de hecho incrementa la contaminación mundial por mercurio.  incluso si se establece la prohibición del comercio, siempre habrá delincuentes que traten de beneficiarse del contrabando del mercurio. Por ello, El Convenio de Minamata se negoció con el objeto de proteger la salud humana y el medio ambiente de la contaminación por mercurio.

El Relator Especial recomienda a los Estados que adopten una estrategia nacional para eliminar el uso del mercurio en la extracción de oro en pequeña escala, que se apoye en principios basados en los derechos humanos y en los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Josladys Vanessa Álvarez Negrón

Enlace al informe completo: Aquí

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