Con base en la resolución 28/14, el Consejo de Derechos Humanos decidió crear el Foro sobre los Derechos Humanos, la Democracia y el Estado de Derecho, que constituiría una plataforma para promover el diálogo y la cooperación donde se estudiarían las mejores prácticas, los desafíos y las oportunidades de los Estados para garantizar el respeto de los derechos humanos, la democracia y el estado de derecho. Posteriormente, en su resolución 40/9, el Consejo decidió que el tema del tercer período de sesiones del Foro sería el “Igual acceso a la justicia para todos: un elemento necesario de la democracia, el estado de derecho y la protección de los derechos humanos”.
La finalidad de este foro era crear un espacio de intercambio de experiencias, dificultades y buenas prácticas, para ello se aborda el tema principal desde diferentes rótulos:
Primero, se habla de la igualdad de acceso a la justicia como fundamento de los derechos humanos, la democracia, el estado de derecho y el desarrollo sostenible.
El acceso a la justicia puede salvaguardar la participación, protegiendo el espacio democrático y garantizando el carácter legítimo de los procesos electorales que reflejaran la voluntad del pueblo libremente expresada. Debe poder garantizarse una justicia electoral rápida, adecuada y efectiva que sea exigible en el contexto del calendario electoral como mecanismo para garantizar la protección del derecho de voto y a ser elegido en elecciones periódicas genuinas y el derecho a una reparación.
Conjuntamente, se debe velar por que las violaciones y abusos de los derechos a la libertad de reunión pacífica y de asociación y todas las denuncias de actos de violencia, amenazas o agresiones contra periodistas y trabajadores de los medios de comunicación se investiguen de forma sistemática, rápida, exhaustiva e independiente y por qué los autores sean llevados ante la justicia.
En segundo lugar, se debate sobre hacer la justicia verdaderamente accesible para todos. Este punto versa sobre las medidas para fomentar la confianza, en particular velando por que todas las comunidades puedan participar en la definición del sistema de justicia penal, con el objeto de inculcar la confianza en las instituciones, en particular entre las minorías y los grupos marginados.
Por otro lado, se trata la accesibilidad a la justicia cuando surge una emergencia, más concretamente el acceso a la justicia en tiempos de crisis. Los Estados deberían seguir garantizando los derechos al recurso, a la igualdad ante los tribunales y cortes de justicia y a un juicio imparcial, conforme a lo previsto en la Declaración Universal de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Para ello, los Estados deberían desarrollar su capacidad de hacer uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones para mejorar el acceso a la justicia, en particular invirtiendo en ese tipo de instrumentos y fortaleciendo la correspondiente capacidad de los funcionarios judiciales.
Por último, en el foro se habla de ampliar los horizontes del acceso a la justicia, garantizando un enfoque de justicia centrado en el ser humano, estableciendo un blindaje de la justicia en aras de los mismos para lo que se debería adoptar un enfoque marco desde la comunidad internacional, la sociedad civil y todos los interesados.
A modo de conclusión es ineludible señalar la necesidad de situar a las personas en el centro de los sistemas de justicia, además de tomar medidas para proteger la independencia del poder judicial.
Enlace al informe completo: https://documents-dds-ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/G22/237/25/PDF/G2223725.pdf?OpenElement