Por Isabella Canales Carballo
Se presenta en la 57ª sesión del Consejo de Derechos Humanos, el informe del secretario general, el cual aborda el impacto del cambio climático en los derechos humanos centrándose, principalmente, en las pérdidas y los daños derivados de los efectos adversos y en soluciones basadas en los derechos humanos y la equidad.
Principalmente, el cambio climático se debe al impulso de las emisiones de gases que generan el efecto invernadero, lo cual ha llevado a significativas pérdidas económicas, afectando principalmente los derechos humanos, como puede ser el derecho a la vida, la salud y al medio ambiente sostenible, ya que a medida que aumenta la temperatura global estas pérdidas y se agravan, de manera que afectan desproporcionadamente a las comunidades más vulnerables.
Estos efectos adversos del cambio climático han afectado el goce pleno de los derechos fundamentales, incluyendo el acceso a alimentos, agua y a la vivienda, ya que son particularmente graves en áreas muy vulnerables, como hemos mencionado anteriormente, y grupos discriminados. También cabe mencionar las pérdidas en territorios y patrimonio cultural, afectando también a los derechos culturales y de identidad.
En este informe, destacamos que los marcos de los derechos humanos deben guiar las políticas climáticas, de manera que se creen mecanismos de reparación, que incluya compensaciones y rehabilitación, creando fondos y comprometiendo a los países más desarrollados para apoyar a las naciones afectadas, de manera que se promuevan medidas como pueden ser, la integración de los derechos humanos en las leyes y políticas climáticas, la participación de las comunidades y la evaluación de las pérdidas de mecanismos de justicia transicional y por último, la movilización del financiamiento adecuado,, de manera que se propongan impuestos por parte de los grandes emisores de gases y se eliminen de esta manera los combustibles fósiles.
Para finalizar, el secretario general implementa políticas y sistemas de protección social a los estados para fortalecer la resiliencia y permitir un acceso justo a los recursos para poder enfrentar los daños causados por el cambio climático, proponiendo también enfoques innovadores para responsabilizar a los actores de estos daños y promover una transacción justa hacia una economía que priorice los derechos humanos y un medio más sostenible.
Enlace al informe completo: Aquí
Isabella Canales Carballo
